jueves, 21 de febrero de 2013

Amor tuitero


El 14 de febrero, twitter se convirtió en un campo de batalla: los amargados foreveralones y los dulces enamorados pendejos. Y pues así me imagine un ataque del escuadrón amargado 




lunes, 18 de febrero de 2013

Devoto de Domingo



DEVOTO DE DOMINGO 
He iniciado una investigación debido a un suceso que me parece raro. Hace quince días fui a misa, por cuestiones sociales, ya saben; una fiesta familiar, el bautizo de un primo para ser exactos.  Ese día conocí a quien, para mi edad -14 años- es el amor de mi vida.
 
Ella estaba como a 3 o 4 bancas delante de mí, sólo veía su cabello y realmente no parecía nada interesante, aún no concentraba toda mi atención en la misma hasta que el padre alentó a los fieles a dar la muestra de paz, todas las personas se movieron para saludar a quien estaba a su lado, incluso hubo algunos que dieron la vuelta para saludar a la mayor cantidad de gente posible, quizá eso los haga sentir como “mejores católicos”. Pero ese no es el punto, el suceso que me marcó fue cuando la vi de perfil, ese perfil cuasiperfecto, que hizo quedarme con deseos de verla entera, de frente y ver si era como lo pensaba. Desde ahí quedé enganchado, luego, sólo esperaba el fin de la misa para que volteara y poder verla bien, para admirarla y olvidar lo que había “escuchado” en la sagrada misa. Al terminar la vi y pensé “no es todo lo que imaginaba”, hasta cuando se acercó y me miró fijamente, esas miradas penetrantes y que te atrapan.
 
Hace ocho días igual fui a misa para ver si la “encontraba”. A mi mamá le sacó de onda porque ya saben, uno a los 14 años ya anda buscando una identidad adolescente, ya no quiere ser el niño de la casa y se rebela contra todo tipo de reglas existentes. Mi hermano sorprendido me dice “¡ora tú! ¿Apoco si vas a ir a misa?” mientras ve los partidos de futbol del domingo. Hasta yo me pregunto lo mismo “¿Para qué? ¿Y si no está? Chale, me veré como un tonto”. Así que optó por mentir: Es la comunión del primo de un amigo de la escuela. Mi mamá me dice que esta bien y hasta me quería dar dinero para el regalo del inexistente “primo de mi amigo”, le dije que no era necesario y salí de la casa.  Llegué a la iglesia más que puntual, 5 minutos antes para tratar de buscarla dentro y sentarme cerca de ella y lo logré. Me senté dos bancas detrás, le vi su pelo y su espalda alrededor de 45 minutos, esperando el momento de la paz –literal- para poder verla nuevamente y admirarla. El momento llego, le di la paz a un señor y a sus 2 hijos que estaban a la izquierda de mí durante toda la eucaristía, mientras de reojo volteaba para reafirmar que algo había pasado, cuando conseguí verla ya no sólo noté lo bella que era, sino un pensamiento más profundo, provocado por el semblante de su cara y cuerpo, esas curvas poco marcadas del cuerpo de una muchacha de  15 años hicieron volar mi mente, pensamientos  más oscuros y sensuales nacieron de lo más interior de mi ser, los sentimientos de un chamaco que entraba a la pubertad. Mis hormonas estaban en su máxima expresión y la mente voló hacia acciones “prohibidas” y más por estar dentro de una iglesia. Le  quité la ropa en mi mente, la imaginé desnuda y me acerqué a ella en forma fantasmagórica para tocar su cara, besar sus labios y hacerla mía.

Después del trance adquirido por mis debrayes sentí una gran vergüenza hacia mi, pensamientos como “chale wey, estás en una iglesia, no deberías de pensar eso” o “te vas a ir al infierno, mira, Cristo sangrando te está mirando y tu pensando en coger a esa morra” inundaron mi mente. Traté de borrar esas ideas que daban vueltas en mi cabeza y fue fácil, fácil cuando puse toda mi atención en el mundo real, en mi cuerpo y en la erección que había sido provocada por ese sueño en estado de vigilia que tuve. Traté de disimularla, pero por mala fortuna llevaba un pantalón de esos que van con traje, quesque porque iba a ir a la comunión del amigo de mi primo y mi mamá quería que me viera formal, así que el bulto era mas notable, maldije el momento de pensar en ella desnuda dentro de un recinto sagrado, no por el pecado, sino por el resultado de mi imaginación o por el castigo divino (quizás un karma instantáneo) Cuando terminó la parte de dar la paz salí del recinto tratando de disimular mi respuesta natural, así como una mujer disimularía su menstruación en una situación embarazosa.  Al terminar la misa nuevamente la vi, pasó frente a mí y nuevamente su mirada fue dirigida a mí, con una sonrisa como plus.
 
Hoy es domingo, y sí, nuevamente iré a misa, hoy el pretexto es que voy a ir al parque con mis amigos, si le digo nuevamente a mi mamá sobre la iglesia no me creería, el problema es qué hacer para no pasar el suceso de hace 8 días, no tengo a quién recurrir y menos la mente abierta para contárselo a alguien, además el objetivo es estar más cerca de ella, quizás una banca detrás de ella, para aprovechar el momento de dar la Paz y tengamos un contacto físico mínimo. Para evitar los momentos embarazosos pensé en comprarme una congelada y guardarla en mis bolsas para tratar de equilibrar mi calor corporal, también pensé en masturbarme mucho durante toda la semana para que no tuviera energías para hoy, otra idea era saturar mi mente con imágenes nada agradables y así contrarrestar el efecto de mis sueños húmedos despiertos. Al final opté por aplicar las tres opciones, así que adiós, nos vemos, voy a misa y por unos bon-ices.  







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jueves, 14 de febrero de 2013

San Valentines


¿Día de San Valentín? ¿ quién es ese santo? Aquí algunas propuestas

San Valentin de Acción 




San Valentín Ranchero




Y pues un Valentín poco famoso